Quizás se llame decepción, quizás se llame desilusión, quizás no sepa que nombre ponerle a lo que ha llegado a sentir. La falta de sinceridad, no contar toda la verdad, no decir todo aquello que es importante sin entrar en parcelas privadas, no saber el motivo, el por qué y de repente, chocarse de frente con la verdadera historia hace que se tambalee todo lo que creía haber construido con una base sólida, tan sólida como el amor... ahora solo esperaba que los cimientos no se vieran afectados
jueves, 8 de octubre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario