El supo que siempre la amaría, él sabía que había sido y sería la mujer de su vida, él sabía que la llevaría dentro de su ser, que nada podría borrar su recuerdo. Se quiere aferrar a la idea de que estaba mejor así y llegaba a creérselo mientras no pensaba en ella... pensar en ella era volver a amarla con intensidad, pensar en ella era ver su sonrisa al despertar, pensar en ella era saborear en su memoria el sabor de su pasión, pensar en ella

era volverla a desear con todas sus fuerzas, pensar en ella era añorar sus manos en su piel, pensar en ella era sentir su respiración en su oido, pensar en ella era volver a desear estar con ella, pensar en ella era su más triste realidad... porque tanto recuerdo no la devolvía a su lado, rememorar no traía consigo la felicidad que vivió junto a ella, solo consiguía extrañarla, echarla de menos, desear volver a ver esos ojos que le llevaron a otro universo y en los que sabía perderse.

Quizás, por eso, se aferra a la idea de que así estaba mejor... sin amarla, sin abrazarla, sin besarla, sin escuchar su voz, sin oir su risa, sin sentir su cariño, sin disfrutar de su pasión, sin tener tantos detalles que le dieron la vida... porque ya no la tenía, ya hacía tiempo que la había perdido... sí, así estaba mejor...

Pensar así le hacía esbozar siempre una triste y lastimosa sonrisa porque sin ella simplemente había dejado de vivir...